Pedro, un ajustador de seguros que viaja por México investigando catástrofes, debe mediar entre “carroñeros” corruptos. Buscando un escape de su realidad cotidiana, acepta actuar en una obra de teatro. En el proceso, la obra va adquiriendo una dimensión emocional inesperada, mayor que la de su propia profesión, creando un paralelo entre su derrota personal y la tragedia humana, generando una crisis de identidad. Dos mundos contradictorios colisionan, dejándolo en una paradoja.